Los
instrumentos de percusión de afinación indeterminada pueden hacer ritmos, pero no
emiten notas concretas o determinadas.
Caja clara: es un tambor, usualmente de poca altura, con bordones dispuestos
diametralmente en la membrana inferior, los cuales le proporcionan su
característico sonido.
Bombo: consiste en un cilindro en cuyos extremos se ajusta una membrana estirada que
es golpeada con baquetas o mazas para producir sonidos.
Bongos: es
un instrumento cuyos parches son ceñidos por unos aros y un sistema de tensión
por llaves. Los tambores van unidos por el costado con una pieza de madera.
Congas: también llamadas tumbadoras, son similares en cuanto la
forma a los bongos, si bien cuentan con un tamaño mucho mayor. Es habitual que se
presenten por pares, y también las podemos encontrar con un formato de tres,
cuatro y hasta cinco congas.
Platos: son un instrumento de percusión
consistente en dos discos circulares cóncavos de metal. Su centro está
agujereado para dejar pasar una correa, cuya función es servir de asas o
abrazaderas.
Timbaletas: son dos pequeños tambores metálicos con membrana que están montados sobre un soporte.
Batería: es un conjunto de instrumentos musicales de
percusión. A lo largo de la historia, ha estado
vinculado directamente con estilos musicales como el jazz, el rock y el pop, donde un percusionista puede tocar
conjuntamente la caja, el bombo, los timbales y los platos.